El tradicional comercio ubicado en la esquina de Medrano y Rivadavia fue elegido por el voto de los vecinos como “Mejor Café Notable de la Ciudad”, en una votación en la que participaron casi 20.000 personas, resultó triunfador en el concurso organizado por BA Capital Gastronómica que se extendió del 9 al 26 de
octubre y el ganador fue elegido con 3.706 votos (de un total de 19.496) entre los 49 cafés notables participantes que integran oficialmente el patrimonio de la Ciudad por antigüedad, arquitectura o relevancia local. El Jefe de Gobierno porteño Horacio Rodriguez expresó sobre el concurso y sobre el resultado de la competencia que buscaba elegir al mejor cafe tradicional de la Ciudad“ Es el mejor café de la Ciudad elegido por la gente, Las Violetas, yo soy bastante habitué. Además del café muy rico, un lugar lindísimo y muy tradicional”, y destacó la “participación” de los vecinos con su voto a través de las redes sociales.
Larreta tambien destacó que “todo esto está en el marco de la movida gastronómica que estamos promocionado” para que Buenos Aires “sea capital gastronómica de Latinoamérica”.Las Violetas ubicado en el tradicional barrio de Almagro celebró este año su 133 aniversario, pero su historia tiene un paréntesis: entre 1997 y 2001 estuvo cerrado “por problemas en la administración”. Cuando reabrió, con nuevo dueño, tuvo lugar la segunda reforma del local, sus características principales son los grandes ventanales resultado de la primera reforma, que se hizo en 1920, y los coloridos vitrales que distinguen este café porteño de cualquier otro fueron colocados entre 1927 y 1940, en el interior del local hay otro detalle: el balcón, donde hasta la década del 40 tocaba la orquesta de señoritas, costumbre que se interrumpió porque “vino el rock, en los 50 y los 60”, recuerda Luciano. Quien suba las escaleras para ir al baño de damas, pasará por este balcón, que parece pequeño para albergar a una orquesta. La fecha de fundación de Las Violetas es el 21 de septiembre de 1884. “Imaginate lo que era la zona, todas casas quintas, no era para cualquier gente, acá venían de galera y bastón. El nombre se lo pusieron por las violetas que había en las puertas de las casas”, cuenta el mozo, quien tiene en Youtube tres videos en los que relata la historia del lugar de trabajo que tanto orgullo le produce.{jcomments on}