Una multitud llega hasta el santuario de San Cayetano
Desde la noche de ayer miles de fieles esperaban en las puertas del santuario de la calle Cuzco para ingresar en el día de su celebración anual en el barrio de Liniers, en el día del patrono del “pan y trabajo”. Religiosos, cientistas sociales, fieles y vecinos en general considera que la celebración anual de San Cayetano es un termómetro de la realidad social y su concurrencia muestra cual es verdadera situación de los sectores sociales medio y bajo.
La misa central se brindará a las 11 y estará presidida por el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Ignacio García Cueva.
“En un contexto social crítico los trabajadores y las trabajadoras de la economía popular no podemos dejar de manifestar nuestra agenda histórica por la que venimos peleando en unidad hace años”, dijeron desde la organización y pidieron “medidas concretas hacia el sector de la economía popular enmarcadas en la Ley General de Tierra, Techo y Trabajo”.
l presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Ojea, afirmó que reclamar “trabajo” es pedir “por la dignidad” y, en vísperas de la celebración de San Cayetano, vinculó las oraciones que se le hacen al ‘patrono del pan y del trabajo’ con la obtención de “justicia” y de “paz”.
Ojea consideró que el trabajo “no es un objeto de compraventa” ni “un objeto de consumo” y lamentó que la persona desempleada “sienta que está de sobra, que no vale”.
“Se siente herido en su dignidad, esa dignidad que solamente le da el ser hijo de Dios. Todos nosotros somos hijos de Dios y tenemos este derecho a trabajar”
Además, la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP) llevarán adelante la bendición de herramientas y ofrendas de las diferentes ramas de la economía popular a las 10.30 en el cruce de las calles Cuzco y Rivadavia.