Se viene Luz de Fuego, Fogata de Parque Avellaneda 2022

Después de dos años de no poder encontrarnos… ¡Vuelve el gran evento de Parque Avellaneda! la cita es el próximo sábado 25 de junio a partir de las 16 horas pero los preparativos ya están en marcha para volver a retomar esta tradicional actividad.

Como siempre habrá una caravana previa partiendo del ex Centro Clandestino de Detención Tortura y Exterminio “El Olimpo”, en Ramón Falcón 4250 dese las 16 horas, continuara por la plaza Che Guevara a las 16:50 Benedetti y Ramón Falcón, siguiendo por Lacarra y Juan Bautista Alberdi minutos después de la 17, para acercarse al parque Avellaneda en la esquina de Directorio y Lacarra a las 17:30, ya dentro del espacio verde a la 18 la caravana se detendrá momentáneamente en el Playón del antiguo Tambo, para finalizar después de al 18:30 en la ex canchas Peuser y dar comienzo a la fogata cuando la noche se apodere del parque.

Desde la organización señalan “Te invitamos a participar ese día con tus amigos, familia, escuela, etc., armando tu Fantochito o simplemente acompañando esta tradición de nuestro querido barrio Parque Avellaneda”. Casi 30 años de rito sostenido, donde nos encontraremos nuevamente en la caravana para finalizar en la quema del Gran Fantoche de las Miserias. La luz que el fuego produce nos iluminará una vez más para seguir apostando a ser mejores personas y poder vivir en un mundo más solidario.

Cada 29 de junio, luego de la recolección de elementos, llega el momento de encender la fogata. No es una simple fogata. La fogata en sí es un rito religioso y de alguna manera conserva esa religiosidad aunque quienes la preparan no sepan lo que se conmemora y celebra en la fecha.

Al fuego se le atribuye un sentido purificador que se mezcla con el rito de la fogata de San Juan. El martirio de los santos Pedro y Pablo se confunde con los «Juicios de Dios» que dictaminaban la quema de aquellos presuntos cómplices del diablo.

El 29 de junio es la fiesta de San Pedro y San Pablo, primer Papa y gran Apóstol de los Gentiles. Dice la tradición que ambos fueron ejecutados alrededor del año 67 por orden del Emperador Nerón. A Pedro lo crucificaron cabeza abajo según su deseo porque se consideraba indigno de morir como su maestro. Pablo, en cambio, fue decapitado en Ostia. El simbolismo del fuego conlleva siempre un trasfondo religioso: expía el demonismo de las brujas, ahuyenta los malos espíritus, conmemora acontecimientos sagrados…

En la noche de San Juan, el 24 de junio, solsticio de verano del hemisferio norte, se encienden fogatas de fiesta a la puesta del sol y hasta su nueva salida, en un intento de erradicar para siempre la oscuridad. La creencia popular dice que en esas noches mágicas se realiza la comunicación entre el mundo profano y el mundo sagrado.

Los Apóstoles, muertos por crucifixión y decapitación, se asocian al rito de la fogata, al sacrificio en la hoguera. Es por ello que en lo alto de la fogata suele haber un muñeco con figura humana, con similitud con un espantapájaros, que es quemado como expiación colectiva, o también para rendir homenaje a mártires inocentes. Esta fiesta pagana y religiosa, que sigue vigente en los barrios, es para muchos una tradición que enlaza con la sacralidad primitiva y auténtica del ritual del fuego.