Clásico con empate incidentes y agresiones en Mataderos

El sábado en Mataderos se enfrentaron Nueva Chicago y Almirante Brown, fue empate en dos en un partido entretenido y vibrante, en un encuentro en el que no falto nada goles, expulsiones peleas y situaciones que demostraron la mediocridad de la categoría en todos los aspectos. Los dos equipos venia mal y no siendo protagonistas del torneo de ascenso por lo que el clásico entre el Torito y la fragata representaba una posibilidad de recuperación al menos anímica.

A si lo entendieron los de Casanova que entraron concentrados y en el primer tiempo sacaron una diferencia de dos goles que también pudo ser mayo y no solo por el rendimiento futbolístico sino fundamentalmente por el nivel de compromiso de sus jugadores con el partido. Los de Brown estaban metidisimos mientras que los de Chicago no entendían bien que es lo que pasaba y ya estaban dos cero a bajo.

Después del segundo gol de visitante concretado por Monzón el primero lo había hecho Nuñez.al final de la primera etapa se desató la locura en el estadio República de Mataderos. Hubo agresiones de hinchas de chicago a los dirigentes de almirante, enfrentamientos de estos con la policía y también de plateistas del local con las fuerzas de seguridad, cuando se produjeron las corridas, jugadores del equipo visitante se prendieron en la discusión y hasta llegaron a increpar a la hinchada local.

El resultado fue la suspensión del partido por más de diez minutos y la expulsión de dos jugadores el arbitro   Jorge Broggi obtuvo la seguridad por parte del jefe del operativo de que el partido podía seguir y tomó la decisión diplomática de expulsar a un jugador por equipo Nazareno Bazán en Almirante Brown y David Achucarro en Nueva Chicago. El primer tiempo se fue el partido cambio por completo.

Transcurridos 15 minutos del segundo tiempo el DT visitante decidió bajar la persiana y finalizar el partido, hizo de pésima forma los cambio y el partido se dio vuelta, una mezcla entre impericia de Brown, malas decisiones arbitrales que perjudicaron a la visita y un gran empujo del chicago encabezado por Paul Charpentier, los llevó al empate.

Un capítulo aparte para e l arbitro y su pésima actuación, que no estuvo acorde con el clásico, Broggi se lesiono a los cinco minutos y continuo hasta el final dirigiendo de lejos y de forma mal desacertada. Como síntesis ambos quedaron con un sabor agridulce, Chicago porque no gana desde hace ocho partidos, aunque cortó la racha de cinco perdidos y Almirante porque se llevo un empate de visitante con dos jugador menos, aunque pudo haberlo definido en el primer tiempo.